Gamificación

El término gamificación se refiere a la aplicación estratégica de elementos, mecánicas y principios similares a los de los juegos (por ejemplo, puntos, insignias, desafíos y seguimiento del progreso) en contextos no relacionados con juegos, con la intención de hacerlos más atractivos y divertidos. Las redes sociales son uno de esos contextos donde se puede aplicar la gamificación. Plataformas como Facebook, Twitter e Instagram son espacios donde negocios, ONGs e incluso organizaciones gubernamentales pueden interactuar con sus stakeholders.

La interacción del usuario es crucial para el éxito de estas interacciones. La gamificación, por lo tanto, representa una oportunidad para aumentar el engagement de los stakeholders en las plataformas de redes sociales. En esencia, la mayoría de estas organizaciones buscan lograr dos cosas: quieren construir una comunidad y quieren que los usuarios regresen.

Si cumplir satisfactoriamente con estas metas se traduce en un beneficio empresarial o social usualmente depende de lo que los stakeholders eligen llamar una “conversión”. Esto generalmente ocurre cuando alguien decide actuar en base a un llamado a la acción. La gamificación también funciona aprovechando tanto la motivación intrínseca (es decir, diversión, disfrute y la oportunidad de completar un desafío) como la motivación extrínseca (es decir, recompensas y otras formas reconocibles de logro).